1.5.23

Levítico 4. Limpiándonos de Pecado.

 

Los seres humanos no somos perfectos por lo tanto no estamos exentos de pecar.

La palabra de Dios dice que todos somos pecadores. Romanos 3: 9 – 10 “¿Qué, pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? En ninguna manera; pues ya hemos acusado a judíos y a gentiles, que todos están bajo pecado. 10 Como está escrito: No hay justo, ni aun uno

El que diga que no peca es un mentiroso. 1 Juan 1: 8 “Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros

No importa nuestra posición o nuestro cargo secular o espiritual todos pecamos de una o de otra forma. Levítico 4: 22 “Cuando pecare un jefe, e hiciere por yerro algo contra alguno de todos los mandamientos de Jehová su Dios sobre cosas que no se han de hacer, y pecare.

Pecar es errar al blanco o equivocarnos, esto quiere decir que todos podemos equivocarnos en cualquier momento.

Comenzar cualquier emprendimiento, desarrollar cualquier proyecto o simplemente querer hacer cambios en nuestra vida ya es objeto de equivocación.

Como podemos ser libres de nuestro Pecado o nuestras equivocaciones.

1. Reconociendo nuestro Error. 1 Juan 1: 9 a “Si confesamos nuestros pecados,” la única forma de corregir es si aceptamos lo malo que estamos haciendo.

·       1.1. Cuando descubrimos el mal también encontramos la solución. Levítico 4: 23 “luego que conociere su pecado que cometió, presentará por su ofrenda un macho cabrío sin defecto

2. Pidiendo perdón a Jesucristo. V 9 b “él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad” Jesucristo conoce lo malo que hacemos, el solo quiere que le confesemos nuestro error.

3. Permitiendo que Jesucristo transforme nuestra vida. Nuestras emociones están dirigidas por nuestro corazón, debemos, permitir que Jesucristo nos dé un nuevo corazón. Ezequiel 36: 26 “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne

·       3.1. Al estar en este mundo es natural y normal que tengamos relación con personas del mundo y muchas de ellas influyen en nosotros tanto que afecta nuestro corazón.

·       3.2. Las dificultades, decepciones y situaciones que tenemos que vivir a diario hace que nuestro corazón se endurezca. Hebreos 3: 8 “No endurezcáis vuestros corazones, Como en la provocación, en el día de la tentación en el desierto,

 

4. Manteniéndonos siempre en Oración. Efesios 6: 18 “orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;” La oración no solo debe ser para pedir o reclamar milagros.

·       4.1. A través de la oración podemos experimentar paz y sobre todo nos acercamos a Jesucristo y nos alejamos de las tentaciones de este mundo.

·       4.2. Debemos orar por los demás para que estén libres de pecado, si las personas que están a nuestro alrededor y el mundo entero se mantiene libre de pecado podemos vivir en Paz.

5. Alimentándonos de manera diaria con la Palabra de Dios. Josué 1: 8 “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.” La palabra de Dios es la que nos enseña cómo vivir bien en este mundo.

·       5.1. El conocimiento de la palabra es lo que nos da vida eterna y salvación. El pueblo de Dios se perdió por falta de conocimiento.

En este mundo siempre estamos en contacto con personas que practican cosas desagradables delante de Dios y en muchas ocasiones logran contaminarnos, es por eso que siempre debemos limpiarnos a través del arrepentimiento y perdón de pecados.