Jesucristo está buscando un pueblo que haga algo más que tan solo ser un espectador de algún evento, en algún lugar llamado templo.
Jesucristo
quiere un pueblo que sea capaz de hacer parte de la iglesia y no solo un
visitante dominical por muchos años.
Muchos de
los cristianos modernos no les gusta servir porque consideran que es una carga,
más que una bendición.
Ser siervo
de Cristo es algo maravilloso, la experiencia de servir a Cristo hace que la
vida del cristiano cobre sentido.
La Vida de alguien Llamado a Servir.
1. Adquiere
Valía. V 1 “Oídme, costas, y escuchad, pueblos lejanos. Jehová me llamó
desde el vientre, desde las entrañas de mi madre tuvo mi nombre en memoria”
Jesucristo no escoge a personas importantes, las personas se vuelven
importantes cuando Jesucristo las escoge.
2. Nos
convierte en sus Instrumentos Útiles. V 2 “Y puso mi boca como
espada aguda, me cubrió con la sombra de su mano; y me puso por saeta bruñida,
me guardó en su aljaba” qué bueno saber que una persona
acude a un templo no solo motivado por la necesidad, su motivación es el deseo
de servir, que hermoso acudir al templo sabiendo que somos útiles para
Jesucristo.
3. Se
sobrepone al Desánimo. V 4 “Pero yo dije: Por demás he trabajado, en vano y sin
provecho he consumido mis fuerzas; pero mi causa está delante de Jehová, y mi
recompensa con mi Dios” podrá haber momentos difíciles en
la vida de un siervo, pero esto no es motivo para renunciar o desanimarse;
Jesús cuando estuvo en la tierra también tuvo momentos de aflicción, pero nunca
abandono su misión.
·
3.1. Las personas que no sirven por
lo general siempre viven desanimadas o cargadas.
·
3.2. Lo único que hacen es criticar
el trabajo que hacen los Demás
·
3.3. Viven de Iglesia en Iglesia
buscando la iglesia perfecta.
4. Su
Trabajo se Proyecta al mundo entero no se queda en cuatro paredes. V 6 “dice: Poco es para mí
que tú seas mi siervo para levantar las tribus de Jacob, y para que restaures
el remanente de Israel; también te di por luz de las naciones, para que seas mi
salvación hasta lo postrero de la tierra.” hablar
del mundo entero no necesariamente quiere decir todo el mundo terráqueo, todo
el mundo puede ser atrevernos a proponer estrategias que permitan sacar el
conocimiento de las cuatro paredes del templo.
La mayoría
de los siervos de Dios planifican grandes estrategias que les permita aumentar
su membresía, mas no hacen estrategias que les permita esparcir el evangelio a
millones de personas a si estas no se congreguen con nosotros o en ninguna otra
Iglesia.
El
requisito para tener vida eterna no es pertenecer a alguna denominación religiosa,
el requisito es tener conocimiento de Jehová y su hijo Jesucristo. Juan 17: 3 “Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el
único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.”
5. Dios lo
Cuida en Todo. V 8 “Así dijo Jehová: En tiempo aceptable te oí, y en el día de
salvación te ayudé; y te guardaré, y te daré por pacto al pueblo, para que restaures
la tierra, para que heredes asoladas heredades”
Jesucristo siempre está al pendiente de un siervo, esto no quiere decir que le
vaya a evitar tener dificultades.
Para el rey
David la mejor forma que tenía Jehová para cuidarlo era entrenándolo, dándole
las herramientas que le permitan enfrentar a sus batallas y salir victorioso.
Salmos 144: 1 “Bendito sea Jehová, mi roca, Quien adiestra mis manos para la
batalla,
Y mis
dedos para la guerra”
6. Tiene
Libertad. V 9 “para que digas a los presos: Salid; y a los que están en
tinieblas: Mostraos. En los caminos serán apacentados, y en todas las alturas
tendrán sus pastos” muchas personas no sirven porque están cautivas de
sus propios temores y traumas, Jesucristo hace que sus siervos sean libres de todo
aquello que los captura y no los deja servir a cabalidad.
7. Dios lo
Guía. V 10 “No tendrán hambre ni sed, ni el calor ni el sol los
afligirá; porque el que tiene de ellos misericordia los guiará, y los conducirá
a manantiales de aguas” Jesucristo abre el sendero por
donde sus siervos deberán transitar, Jesucristo tan solo marca el camino mas no
camina por nosotros.
8. Dios
nunca se olvida de nuestro Trabajo y esfuerzo. V 15 “¿Se olvidará la mujer
de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque
olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti” muchas de
las personas a quienes servimos se olvidaran de lo que hicimos y hasta de
nosotros mismos, pero Jesucristo siempre se acordará, él es quien galardona a
sus siervos.
El
propósito del cristianismo no es llenar salones con gente que solo quiere un
milagro en su vida, Jesucristo quiere un pueblo conformado por personas
entenadas en el servicio para conquistar y transformar al mundo, el estar
sentado en un templo no salva a nadie, lo que salva es el conocimiento que
podamos tener sobre Jehová y su Hijo.